Rafael Nadal se proclama campeón del Mutua Madrid Open beneficiado por la retirada de Nishikori en la final y sigue defendiendo el número 1
Con las
bajas a última hora de Federer y Djokovic, el primero por causas familiares y el segundo por lesión,
Nadal cumplió con su condición de favorito y se alzó con el título. El resto de
rivales potenciales cayeron próntamente, como es el caso de Fognini (Dolgopolov 5-7 6-4 3-6), Wawrinka (Thiem 6-1 2-6 4-6) o Murray (Giraldo 3-6 2-6)
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| Nadal consiguió su cuarto título en el Masters 1000 de Madrid |
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Monaco, Nieminen, Berdych y Bautista Agut fueron los escollos que superó Nadal para llegar a la final. Monaco en sus horas más bajas y el finlandés Nieminen no fueron suficiente para mostrar el nivel de juego del español.
En cuartos de final se esperaba un duro partido ante Berdych, pero el gran juego desplegado por el español y la cabeza de cristal de Berdych propiciaron una contundente victoria del español por 6-4 6-2. En semifinales esperaba
Bautista Agut, que pese no haber jugado nunca contra Rafa y estar en sus primeras semifinales de un Masters 1000, dio la cara y luchó con valentía pese a caer por 6-4 6-3.
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| Rafael Nadal derrotó a un solo top 10 en un cuadro de Masters 1000 |
El otro finalista,
Kei Nishikori, tuvo una de las mejores semanas de su carrera, tanto por resultados como por juego desplegado.
Enfrentó a Dodig y García Lopez en sus dos primeras rondas, con fáciles victorias. En
octavos de final peleó duramente para derrotar a Raonic en dos tie breaks, y en
cuartos de final se inspiró para derrotar a un gran Feliciano, que cuajó un gran torneo. Pero
el partido en mayúsculas del torneo fue la semifinal entre Nishikori y Ferrer.
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| Nishikori llegó a la primera final de Masters 1000 de su carrera |
Mención especial merece el
partido que enfrentó al japonés Kei Nishikori frente al español David Ferrer. Un
Nishikori en estado de gracia desplegó un gran juego ofensivo, especialmente con su revés, que hubiese servido para doblegar a cualquiera. Pero no contaba con David Ferrer.
El alicantino bregó, corrió y remó desde el fondo de pista como nunca. Después de
perder el primer set 6-7 y estar 4-5 abajo en el segundo con bola de partido para el japonés, la casta y el corazón de Ferrer llenaron la Caja Mágica y consiguió darle la vuelta a un partido que estaba muy difícil y ganar el segundo set por 7-5. Pero
Nishikori no se arrugó y con un tenis sorprendente llegó al 5-3 y 40-0 con su servicio en el tercer set.
Hasta 8 bolas de partido salvó Ferrer en ese juego sufriendo y peleando como un león, pero a
la décima fue la vencida para Nishikori, que consiguió vencer en el mejor partido del año hasta ahora por 7-6 (5) 5-7 6-3.
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| Ferrer demostró que no le hace falta ganar para ser un grande |
El día de la final llegó, y nadie esperaba lo que iba a pasar.
El japonés barrió de la pista a Nadal, y solo una
desafortunada lesión que arrastraba desde los cuartos de final le impidieron alzarse con su segundo título consecutivo. Después de un
contundente 6-2 2-0 para el nipón, la lesión se agravó y le impidió jugar,
retirándose finalmente cuando el marcador era de 2-6 6-4 3-0 para Nadal. Hay que destacar el
mal comportamiento del público silbando a Nishikori, primero porque ganaba al ídolo local y después porque se retiraba destrozado por el dolor y después de un gran ejercicio de profesionalidad. También cabe destacar el
nulo "fair play" de Nadal, celebrando los errores de su rival cuando se veía que este estaba claramente lesionado.
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| A pesar de la dura derrota, Nishikori se conviente en el primer japonés en entrar al top 10 |
Por último, me gustaría destacar la
pobre organización del torneo. Infiltrados en los palcos VIP para crear sensación de relleno, el alto precio de las entradas, la poca afluencia de público, las malas comunicaciones y la pésima realización del torneo en televisión por Antena 3 y la Sexta son algunas de las razones que imposibilitan que Madrid crezca como torneo.
Tres torneos a nivel ATP tenemos en España, y pudiendo ser Madrid el mejor, no lo es. Sabor agridulce para poner punto y final a lo que debería haber sido una gran semana de tenis.
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| Las gradas vacías del torneo evidencian la desgana del público por asistir |
